El Festival de Narrativa y Poesía, Ojo en la tinta, es un evento literario independiente que se realiza en la ciudad de Bogotá, Colombia, desde el año 2009. Este busca encontrar y difundir nuevas voces en la literatura colombiana y latinoamericana. El festival es organizado por el Colectivo Literario La Raíz Invertida.

martes, 6 de septiembre de 2016

Tratado del alba - Henry Alexander Gómez



"El Jurado quiere destacar que el libro premiado posee un notable y feliz equilibrio entre imaginación creadora y pensamiento que permite al autor la construcción de un rico universo poético, donde la reflexión acerca de la palabra se prolonga de manera natural hacia aspectos metafísicos, para culminar con lo que podría considerarse una palpitación renovada de la preocupación social en la poesía".



Tratado del alba
VI Premio Internacional de Poesía José Verón Gormaz




Teoría de la luz


Roberto Juarroz

He abierto la palabra amor
y, adentro, encuentro otras palabras
que no dejan de mirarme fijamente.
Escojo una de ellas,
le hago también un orificio,
para ver más adentro en el lenguaje, 
y allí encuentro una palabra
que se parece al corazón del mundo.

En medio de las dos mitades del lenguaje,
sobre la línea que separa el comienzo y el final,
comprendo que un vocablo,
más profundo
que el abismo de Dios, nos sostiene.

Todo lenguaje se contiene a sí mismo,
como toda palabra que decimos o callamos, 
lleva adentro la soledad del hombre.






Carlos Obregón

Desde adentro de la vida
miro llover.

Miro como quien encuentra la esperanza
sin haberla buscado,
como quien hunde sus manos en la ceniza
de una hoguera nunca encendida.

Llueve sobre la orilla de tus pasos.

Porque tu hondura es la lejanía
de ver el cielo sin poder tocarlo,
el temblor de una oración
sin alfabeto, la vigilia de dormir
sobre una música olvidada.

El leve polvo de tierra
que levanta la llovizna
                                          deletrea tu silencio. 





e.e. cummings

a(
      p
      ája
      ro
      qu
      e
      e
      l viento
                     b
                     orra
       ().
       Lluvia de sol
       .
         )m
              or





Arqueología

Enterrar una palabra,
                esconder su tumba entre las piedras.

Desenterrarla después de muchos años,
quitarle la tierra endurecida,
los restos de polvo,
                                  el óxido,

hasta que brille como una antigua reliquia.

Colocarla en medio de la página en blanco
y estudiar su antigüedad, interpretar su pasado,
descifrar el color original,
establecer su importante papel en la historia.

Incluso admirar su dignidad de estrella olvidada.

 

 




La noche sumergida



Mirar

Ver es sumergirse en el terror,

caminar por un jardín
de telarañas
tejidas por la boca del asesino.

Tanto para cerrar los ojos y mirar adentro,

no para apagar lo apagado,
                                        para poder asesinarnos. 






Soñar

Dormir
              a un lado
de los cuerpos
                          mutilados,

aquellos
que no son más
             que recuerdo
             de la hojarasca.

La herida
             del silencio
             será
             nuestra cubierta.






El paraíso

El desierto está aquí,
a la intemperie.

Sólo porque el paraíso está devaluado,

sólo porque los labios
se tiñeron de una tierra enrarecida

y bajo un precipicio de lunas
                                         asfixiamos el aire.






Intemperie

Abrazar
las cabezas moribundas

y cabalgar
bajo la sílaba del miedo.

Amasar un tañido
de campanas negras
y beber
              todo el aire
de los disparos en los muros.

De tanto en tanto,
                      vamos hollando el mundo.





Oración para Juan Gelman

Detrás de vos la noche crece en su latido,
se sostiene un pajarito que picotea la muerte
y entona todas las horas que se tuercen en la sed,
e hila los huesos de un sol demasiado triste.

Vos sabés lo que dura esa noche,
lo que mide la tristeza de quien ora y suplica
a un Dios que ha dejado su cena sin tocar.
Que tú corazón es la vitrina donde nosotros
guardamos nuestras bocas, que es la vela sin pabilo
que intentó horadar el sudor de las voces. Eso vos lo sabés.

Pío, pío, canta ahora la muerte bajo tu piel. Un pío
no tan lejano, no tan distante de aquello
que nombra y llama a los que ya no tienen labios. Piedra
que me sentás sobre la lluvia, furia que me lamés la carne.

José Galván ha llamado a mi puerta. John Wendell se reclina
ante la silueta de un perro que ya no ladra.
Y ya sin voz, ya sin ojos para escuchar la oscuridad de los caballos.

Aquí se parte el lápiz y gelmaneamos con palabras
puestas a secar al sol. Porque Juan Gelman es un solísimo,
solísimo relámpago del alba. Una paloma otoñal. Un árbol desnudo
que acuesta su llanto en la hierba para que nosotros
bebamos su rocío.

Y el pájaro pía y se despide. Pío, pío dicen las campanas.
Piar es cosa de poetas, piar es cosa de hombres que respiran
amparados a los brazos de la madrugada. Como ese amor que regás, como
esa cuerda con la que atás el mundo, como los rostros de los desaparecidos
que brillan entre las grietas de cada uno de tus silencios. 


 


 

Henry Alexander Gómez

 

(Bogotá, 1982). Candidato a Magister en Creación Literaria de la Universidad Central y Profesional en Ciencias Sociales de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas. Es director del Festival de Literatura “Ojo en la tinta”. Ha recibido diferentes distinciones, entre ellas, el Premio Nacional de Poesía Universidad Externado de Colombia, el Premio Nacional Casa de Poesía Silva y el Premio Internacional de Poesía José Verón Gormaz de España por el libro Tratado del alba.

 


Ha publicado los libros Memorial del árbol (2013), premiado en el IV Concurso Nacional de Poesía Obra Inédita, Diabolus in música (2014) Premio Nacional de Poesía Ciro Mendía y Teoría de la gravedad (2014), publicado en Quito, Ecuador. Sus poemas aparecen diferentes antologías y revistas de Colombia y el exterior. Hace parte del comité editorial de la Revista Latinoamericana de Poesía La Raíz Invertida (www.laraizinvertida.com).

jueves, 17 de marzo de 2016

El diablo en la musica - Henry Alexander Gómez



De libro Diabulus in música (2014)



Johnny Cash

Enterré el puente de mi guitarra en el aire, sacudí las polillas de mi sombra y cultivé el vapor de la música sobre el heno de los días, a un lado de la carretera, donde los mundos se fecundan.




Jim Morrison

Desde lo alto de la duna dejo caer una escudilla que rasga un aire extraño que acecha mi presencia. Ancianos ángeles amasan mi saliva con arena. ¿Quién acompañará mis huellas para descifrar el verdadero rostro de la luz?

Romper el cristal. No hay noche más fría. El nombre del desierto me persigue. Las puertas se derrumban.

Con el hueso roto del coyote buscaré mis años perdidos junto a un demonio que trama el antiguo imperio del cielo.




Janis Joplin

Inútil es viajar entre el olor de la ceniza, sepultar amapolas en las mandíbulas del ángel ciego.

Canción de la infancia: fumar el opio de la piel y beber la última gota de un blues de la botella más oscura de un bar de Louisiana. El pulmón amordazado mientras el gramófono suena a Bessie Smith o a Billie Holiday.

Una huella descalza la delata, la delata su sombra transparente.

Hurga una grieta en la penumbra. Descúbrete impedida para contar la multiplicidad de nubes que rodean tus dedos.

Es bello vigilar desnuda al sol cuando anochece: la orgía de su voz baja cóncava al interior de la tierra.




John Bonham

En el grito del árbol encontrarás la semilla. Mi escritura viaja al galope del viento entre los cascos del caballo. Esta tierra se adelgaza ante el trueno del agua en el pecho de un pájaro.

He dejado al granizo sin aliento.





Jon Lord

Recogí de la neblina en la mañana cada uno de los hilos que expanden las yemas de mis dedos. Hilar es mi destreza, la certidumbre de dormir en una cavidad de sonidos que arden como diluvio perpetuo.

Un flameo inmutable me sigue a todas partes: una tela de música que hoy es mi mortaja, una sonata que ordena a un tiempo la dinastía secreta de un centenar de relámpagos.

Mi corazón es la rueca, la bruma el ovillo, mi música, una calina de fuego que lo ha envuelto todo. 





Pappo Napolitano

Me reconozco en el polvo del adiós, en las piedras errantes: con un hilo de viento me hice un collar de caminos.

Dejo el diapasón de mi guitarra bañado por un rumor de flores vestidas por la lluvia. Dejo mi amada Harley Davidson con la que probé el peso de la fe y la pulsación de la muerte. Hay una canción de espejos y lumbres al final de la autopista.

Nada vale más que un viejo blues cortejando las voces aromáticas del sueño.





Ronnie Van Zant

Al amanecer, algún extraño viajero señala con el dedo un pájaro que guarda el nombre de todos los pájaros.

Su vuelo ha dibujado, en el corazón abierto del alba, cada hilo de acero con los que un niño ovilla el paraíso de mis alas.





Ian Curtis

Hoy tengo la mirada hecha de tierra para arrojar un puñado al vacío, el espíritu de papel para prenderle fuego y hacer con las cenizas música para sujetar mi destino. 

Vengo de abrir una hendidura donde la luz se reconcilia con la muerte, de atar mi cuerpo hueso por hueso a la llama de mi voz, como la danza de Caín en la sonrisa oscura del miedo.

Hoy tengo la boca en la mitad del pecho con una paloma agrietada en la garganta. 

El aire está roto en pedazos.




Stevie Ray Vaughan 

Este es mi evangelio:

La soledad del universo se reduce a seis élitros de acero; pesan como el calibre de la araña en el corazón de una rosa, zumban como un crujir de huesos de pájaros salvajes.  
Mi voz es clavicordio de agua, pentagrama de fuego, el gesto de todo y de nadie.
La lluvia en el tejado afina el blues-rock de mi guitarra: tormenta de hierro, piedra pluvial que inunda el refugio donde el tiempo pliega sus doce alas.  

Mi credo es la ausencia de Dios, el bostezo del cielo.





Quorthon (Tomas Forsberg)

Primero haré de mi nombre un festín de la sangre. Luego sepultaré cada sílaba de mi música y haré que sea desterrada de la aurora. Mi voz cruzará el Valhalla con mi rostro abierto por la uña del cuervo. 

Una virgen de hierro para atesorar el nacimiento. Para honrar el martillo del trueno, una semilla hervida en la miel de la noche.

Por cada pluma del ángel asisto al presidio de mi raza. Por cada cartílago de música “El Oscuro” destila su veneno.

Es mortal el abismo que nos rodea.

 



Euronymous (Øystein Aarseth)

Es la profundidad del bosque lo que retengo entre mis manos. El aullido de una aureola negra que me alcanza.

Una luna secreta escarba los misterios del Señor oscuro. Satán es quien lanza cada vocal de mi nombre al fuego para profanar la lluvia sonámbula.

Sortilegio del espanto. La otredad de la sangre. Una leche sorda que invade la espesura.

Afilaré mis pupilas blancas a un ataúd de piedra: también la oscuridad es la luz más brillante.

 

 




 

Henry Alexander Gómez


Bogotá (1982). Profesional en Ciencias Sociales de la Universidad Distrital Francisco José de Caldas y estudiante de Maestría en Creación Literaria de la Universidad Central. Es director del Festival de Literatura “Ojo en la tinta”. Su libro Cartografía de la luz ganó el XXVI Concurso Nacional de Poesía Universidad Externado de Colombia; con el libro Georg Trakl en el ocaso fue Segundo Premio del IX Concurso Literario Bonaventuriano de Poesía; ganador del Concurso Nacional “La poesía de la vida cotidiana” - Casa de Poesía Silva.

Ha publicado los libros Memorial del árbol (2013), premiado en el IV Concurso Nacional de Poesía Obra Inédita, Diabolus in música (2014) Premio Nacional de Poesía Ciro Mendía y Teoría de la gravedad (2014), Mención de Honor en el I Premio Nacional de Poesía, Festival Internacional de Poesía de Medellín y publicado en Quito, Ecuador.

Sus poemas aparecen en los libros Raíces del viento (2011), en la antología Postal del oleaje: poetas nacidos en los 80. Colombia-México (2013), y en diferentes revistas de Colombia y el exterior. Hace parte del comité editorial de la Revista Latinoamericana de Poesía La Raíz Invertida (www.laraizinvertida.com). 

jueves, 4 de febrero de 2016

“Introducción al cuento norteamericano”

Taller de Creación Literaria

“Introducción al cuento norteamericano”

Sherwood Anderson - Jack London - Dorothy Parker - Francis Scott Fitzgerald - William Faulkner - Ernest Hemingway - John Cheever - Flannery O´Connor - Raymond Carver – A. M. Homes y muchos más.

Este será un taller de escritura creativa con el género del cuento, en el cuál se hará un acercamiento a la tradición norteamericana, identificando sus principales autores y asimilando sus diferentes técnicas. 

A partir de diferentes técnicas narrativas devenidas de la tradición anglosajona, encontraremos puentes de observación del mundo cercano y reflexionaremos sobre nuestra identidad latinoamericana. 

Biblioteca Pública El Tunal Gabriel García Márquez
A partir del sábado 6 de febrero
5:00 p.m. Sala de literatura.
Calle 48b Sur No. 21-13


 Biblioteca Pública de Suba Francisco José de Caldas
A partir del martes 9 de febrero
6:00 p.m. Sala de literatura.
Carrera 92 # 146 C – 24 (Detrás de Subazar)

Entrada Libre